Cena honra los esfuerzos de los voluntarios del 'Diocesan Development Drive – DDD'

Friday, Nov. 02, 2018
Cena honra los esfuerzos de los voluntarios del 'Diocesan Development Drive – DDD' + Enlarge
Durante la cena DDD de agradecimiento realizada el 26 de octubre, el Obispo Oscar A. Solis agradece a quienes trabajan en el ?Dioce-san Development Drive'.
By Marie Mischel
Intermountain Catholic

Traducido por: Laura Vallejo

DRAPER — Cada año  personas de cada una de las parroquias y misiones que conforman la Diócesis Católica de Salt Lake City, son voluntarios en el  Diocesan Development Drive, el cual es la apelación anual del Obispo por fondos para los programas administrados por el Centro Pastoral. El 26 de octubre estos voluntarios fueron reconocidos durante una cena de apreciación realizada en la preparatoria Católica de Juan Diego en Draper.

El evento celebró los diligentes esfuerzos de los voluntarios “que a nombre de la apelación del Obispo ayudan  fundar más de 30 ministerios diocesanos, programas y servicios que se extienden más allá de las capacidades de cualquier parroquia,” dijo Karin Hurley, directora de la Oficina diocesana de Corresponsabilidad & Desarrollo. “El DDD es esencial para la energía y vida de la Iglesia en Utah.”

Ella dio varios ejemplos de cómo las contribuciones al DDD son puestas en acción. Por ejemplo, los fondos ayudan a pagar el trabajo de Jean Hill, el enlace gubernamental quien es la directora de la Comisión de Paz y Justicia diocesana.

“Bajo el liderazgo de Jean y la dedicación de las personas que sirven junto a ella, en la Comisión de Paz y Justicia, la defensoría Católica a nivel local, estatal y nacional  está viva y en marcha en nuestra diócesis y en nuestro estado,” dijo Hurley.

Además el DDD contribuye con las oficinas diocesanas de educación religiosa y liturgia las cuales “comparten la visión de evangelización y catequesis, prioridades de nuestro Plan Pastoral,” dijo Hurley. Las oficinas brindan oportunidades de oración, de formación continua y estudios teológicos, entrenando catequistas, ministros de música, ministro de Comunión, lectores y educadores Católicos, así como brindando recursos para el clero y laicado.

El presentador de la cena fue  Jason Caywood, feligrés de la parroquia de St. Vincent de Paul quien ha servido en el Consejo de Corresponsabilidad diocesano desde el 2105, en el consejo de su parroquia por cerca de 5 años y será el representante de su parroquia durante el próximo año.

La base de la corresponsabilidad es la gratitud, dijo Caywood, agregando que los res componentes de la corresponsabilidad – Tiempo, Talento y Tesoro- particularmente subrayando el talento.

“Todos somos hechos específicamente de la manera que Dios quiso que fuéramos, y eso incluye los talentos que nos dio,” dijo Caywood.

“Todos aquí tenemos ciertos talentos que podemos usar, y que hemos encontrado cuando ponemos a trabajar esos talentos, es ahí en donde me siento más conectado con Dios, cuando estoy más contento, cuando estoy más satisfecho, cuando somos más efectivos en lo que sea que estamos haciendo… No escondan sus talentos… sean los que estos sean. Úsenlos y vayan a servir.”

El reverendísimo Oscar A. Solis DD. Obispo de Salt Lake City, en sus comentarios finales de la noche, agradeció a las personas involucradas en el DDD diciendo que su trabajo no puede ser pasado por alto.

“Ustedes han sido grandes colaboradores en nuestro ministerio y es por eso que nuestra Iglesia sigue existiendo y llevando la misión de Cristo en Utah,” dijo el Obispo.

La Cristiandad tiene sus raíces en la generosidad. “Cuando ustedes dan algo que tienen, significa que están compartiendo los dones que se les han dado generosamente pro nuestro Señor. No es una responsabilidad, es una forma de vida, el dar y compartir lo que Dios nos ha dado. Y es por eso que la corresponsabilidad debe de ser vista bajo la luz de compartir.”

Urgiendo a los presentes a mantener su identidad Católica como seguidores de Cristo en estos tiempos difíciles el Obispo dijo “en medio de los pecados y la fealdad, podemos mostrar al mundo que todavía somos personas de esperanza, personas que creen en el poder de la gracia de Dios, y personas que creen que en la muerte está la vida, que en la obscuridad yace la esperanza. En medio del pecado, el amor prevalece. Ustedes están llamados, ustedes han sido elegidos y ustedes aceptan proclamar la Buena Nueva.”

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