DRAPER — Cientos de fieles católicos de la comunidad hispana de Utah se dieron cita del 27 al 28 de julio en las instalaciones del Centro Católico Skaggs para la celebración del Congreso de Familias 2024 de la Renovación Carismática Católica en el Espíritu Santo.
Bajo el tema ‘Jesús Eucaristía en el Corazón de las Familias’ los presentadores cautivaron la atención de los adultos, jóvenes y niños que estuvieron en asitencia.
Los presentadores fueron el padre Jorge Roldan, guía espiritual de la renovación carismática diocesana y pá-rroco de la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe en Salt Lake City; el padre Diego Burítica de la Diócesis de Worcester, Massachusetts; Janeth Carreño de la Diócesis de Orange, California; Jose Fuentes, un predicador de jóvenes de Washington D.C.; y el grupo Príncipe de Paz, ministerio de música de Las Vegas, Nevada. Con el apoyo y ayuda de los voluntarios de la Renovación Carismática Católica en el Espíritu Santo asi como de la Oficina Diocesana del Ministerio Hispano se ofrecieron presentaciones, alabanza, másica, meditaciones, refle-xiones, camaradería y el reconocimiento sobre la importancia del significado de la Eucaristía.
El Congreso concluyó con la Santa Misa celebrada por el Obispo Oscar A. Solis; concelebrando estuvieron el padre José Barrera, administrador de la parroquia de San Felipe en Wendover, el padre Roldan y el padre Burítica.
El Obispo Solis comenzó su homilía compartiendo su experiencia en el Congreso Eucarístico Nacional que se llevó a cabo del 17 al 21 de julio en Indianapolis, Indiana.
“Fue una hermosa reunión de miles de personas enfocadas en la presencia real y viva de Cristo en la Sagrada Eucaristía. Nos recuerda el don más grande que Dios nos ha dado en Cristo, que la Iglesia nos enseña como la fuente y cumbre de nuestra vida.”
“Durante el Congreso familiar, “reflexionamos sobre este gran sacramento de amor y unidad,” dijo el Obispo
Haciendo referencias a las lecturas del día, Reyes 4:42-44; Efesios 4:1-6 y Juan 6:1-15, en las cuales se Na-rran dos historias sobre la multiplicación milagros de los panes, el Obispo Solis dijo que el profeta Isaías recibió la generosa oferta de 20 panes de cebada. “Invocó el poder de Dios, que los multiplicó milagrosamente y pudo alimentar a cien hombres.”
La historia nos enseña un par de lecciones importantes sobre Dios, dijo el Obispo Solis. “En primer lugar, Dios pudo haber hecho un milagro para proveer de la nada toda la comida que la gente puede comer con su poder. Sin embargo, pidió a sus discípulos que les consiguieran comida. Con los pocos recursos que le ofrecían, Jesús lo multiplicó y lo transformó en algo extraordinario. Probó que nada es imposible y que todo es posible con Dios.”
“Mis queridos amigos, la historia de la multiplicación de los panes nos enseña que Dios hace maravillas a través de personas comunes como nosotros, especialmente si estamos dispuestos a compartir nuestra comida con los demás,” dijo el Obispo.
Al concluir su homilía el Obispo Solis dijo que “Los milagros siguen siendo una realidad en nuestro mundo hoy en día. Pero el milagro que el mundo necesita ahora es la conversión de los corazones de las personas: tener plena confianza en la providencia de Dios para que podamos aprender a desprendernos de nuestras posesiones y compartirlas con los demás. Vivamos “de una manera digna de la llamada que hemos recibido” y, como Cristo, seamos la Eucaristía para los demás, rotas y compartidas los unos por los otros. Vivamos «de manera digna de la llamada que hemos recibido», como Cristo, seamos la Eucaristía para los demás - partida y compartida unos por otros.”
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