Traducido por: Laura Vallejo
SALT LAKE CITY — Describiendo a la crisis de refugiados como “un problema urgente al que nos enfrentamos hoy como comunidad global,” el Reverendísimo Oscar A. Solis, Obispo de Salt Lake City, dijo que la solución se encuentra en la tradición religiosa de la Iglesia Católica.
“Lo bueno de esto es que la Iglesia ha sido consistente desde sus inicios,” dijo el Obispo Solis a un grupo de jóvenes durante una reunión realizada el 20 de febrero como parte de “ Christ in the City; en el ‘Tap at Wasatch Brew Pub’. “Tenemos la cultura religiosa de dar la bienvenida al extranjero.”
El Obispo Solis se refirió al Libro de Levítico, en el cual se exhorta a que se dé la bienvenida a los extranjeros en nuestra vida.” Citando estadísticas que indican que hoy en día existen 12 millones de inmigrantes en s Estados Unidos, el Obispo Solis reconoció que las actitudes hacia ellos generalmente son negativas.
“Las personas ... No saben cómo reaccionar ante gente nueva; no saben cómo reaccionar cuando han sido referidos como faltantes a la ley; no saben cómo reaccionar con los extranjeros en sus vidas.”
El Obispo Solis dijo que existe una “demonización de los refugiados y de los inmigrantes” lo cual va en contra de la cultura del Papa Francisco quien busca promover “una Iglesia a inclusiva, una Iglesia de bienvenida, una Iglesia que acoge a los extranjeros como hermanos y hermanas.”
La fundación de como la Iglesia se enfrenta a los temas de refugiados e inmigrantes está en Mateo 25:40: “En verdad les digo que cuando lo hicieron con alguno de los más pequeños de estos mis hermanos, me lo hicieron a mí,” dijo el Obispo.
“Toda persona que conocemos refleja la imágen y semejanza de nuestro amoroso Dios. Así es que cada persona, bien sean ricos pobres, amarillos o cafés, refugiados o inmigrantes indocumentados, son la imagen de Dios, merecedores de respeto, merecedores del amor y es por eso que siempre debemos de recordar el Evangelio de enseñanza de Cristo.”
“Tenemos el reto de ser embajadores del bien común, embajadores del amor de Cristo, especialmente con los pobres,” dijo el Obispo Solis. “... Hoy en día es crítico para que tengamos nuevos y renovados profetas en nuestros tiempos quienes hablan el lenguaje del amor, quienes demandan una conversión radical de nuestros corazones, un cambio de actitudes, el ser capaces de desarrollar ese tipo de respeto por cada persona.”
Después de su charla, el Obispo Solis respondió preguntas sobre las oportunidades que los laicos tienen para ayudar a los refugiados encuentren comunidad, compartan el Evangelio con los demás y para que la defensoría de los refugiados tenga más balance con la defensoría de los no natos.
“Con respecto a la santidad de la vida, la Iglesia ha calificado esto para que signifique desde la concepción hasta ala muerte natural. Existe unos problemas en nuestra sociedad en donde la santidad de la vida se trata solo de los bebés, pero la dignidad también debe de ser protegida.”
Un asistente al evento, Jake Livingstone, quien dijo que está dejando el ser protestante y se encuentra considerando ser un ‘Cristiano Ortodoxo’, dijo que las palabras del Obispo Solis le llegaron muy profundo.
“Totalmente estoy de acuerdo con que existe una falta de compasión en el mundo. Realmente me gustó lo que dijo sobre la santidad de la vida desde su concepción en el vientre hasta la muerte natural.”
Su amiga, Miray Weeks, dijo que realmente le gustó el énfasis del Obispo “en el sacrificio de darse uno mismo, hacia la santificación a través del sacrificio.”
‘Christ in the City On Tap’ está patrocinado por el ministerio de Jóvenes adultos de la Catedral de la Magdalena. El grupo de jóvenes de entre 21 y 35 años de edad se reúnen semanalmente los días miércoles para veladas de camaradería y actividades. ‘On Tap’ es una serie mensual con presentadores que hablan de diferentes temas teológicos.
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