La diócesis de Salt Lake City certifica a 70 nuevos ministros eclesiales laicos
SALT LAKE CITY — El 17 de agosto el día tan esperado por muchos después de cuatro años en un programa de formación contínua, 70 hombres y mujeres de la diócesis de Salt Lake City fueron certificados como ministros eclesiales laicos durante una Misa por la Nueva Evangelización y bendición de los Ministros Eclesiales, celebrada en la Catedral de la Magdalena. La ceremonia estuvo presidida por el Reverendísimo Oscar A. Solis, Obispo de Salt Lake City.
De los 70 ministros, 13 culminaron el programa de LEM en inglés y 57 de ellos el programa de EMAUS II.
Concelebrando la Misa estuvieron presentes Monseñor Colin F. Bircumshaw, vicario general; el padre Martin Diaz, rector de la Catedral de la Magdalena; el padre Kenneth Vialpando, vicario para clero; el padre dominico Wayne Cavalier, director fundador del Instituto Congar para el Desarrollo de Ministerio, el cual brindó los recursos para los programas LEM y EMAUS II; el padre Gustavo Vidal, párroco de la Iglesia de of San Francisco de Asís; el padre Francisco Pires, párroco de la Iglesia de San Pedro y San Pablo; el padre Joseph Delka, vicario parroquial de la Catedral de la Magdalena; y el padre paulista Evan Cummings, cuya mamá recibió la certificación ese día.
El diácono Guillermo Méndez fue el diácono de la Misa; el diácono George Reade canciller diocesano fungió como capellán en la celebración.
Durante la Homilía el Obispo Solis hablando tanto en inglés como en español dijo que ese día era de suma importancia. “Dios ha bendecido a esta diócesis con los ministros eclesiales laicos, hombres y mujeres quienes durante cuatro años de oración y estudio crecieron en su conocimiento y sabiduría para prepararse a ser miembros activos en la estructura pastoral de nuestra diócesis...Ellos serán enviados como ministros pastorales formados de nuestra Iglesia local.”
El Obispo Solis dijo que la diócesis de Salt Lake City está comprometida por cerca de 300,000 Católicos, 69 parroquias y misiones a lo largo del estado de Utah. A pesar de los recursos limitados de la misma para llevar la misión de Cristo por todo el estado “la población Católica es creciente, y hay mucho trabajo por realizar predicando el Evangelio en todos los rincones de nuestro estado. Pero gracias a Dios por el don de los programas para ministros eclesiales laicos.”
Desde hace 12 años, cinco generaciones de ministros eclesiales laicos se han certificado, tres en inglés y dos en español.
“Son trabajadores pastorales laicos comprometidos con la misión de la evangelización,” dijo el Obispo Solis.
Al dirigirse a los ministros eclesiales certificados el Obispo Solis les dijo: “Mis queridos amigos, el Espíritu Santo los está guiando a ser faros de fe, esperanza y amor en nuestra diócesis y en el mundo. Su responsabilidad como ministros eclesiales laicos es no solo recordar su agenda personal, sino la misión de Cristo. No deben de basarse solo en su habilidad y conocimiento, ya que el Espíritu Santo está con ustedes, y es la fuente de su inspiración y poder. Espero que el Plan divino se realice en sus vidas y en su ministerio.”
Durante la ceremonia Susan Northway directora de formación de fe quien está a cargo del programa en inglés llamó uno a uno a los 13 nuevos ministros eclesiales laicos. Por su parte Maria Cruz Gray directora de la Oficina del Ministerio Hispano, quien estuvo a cargo del programa EMAUS II, llamó uno a uno a los 57 ministros eclesiales laicos certificados.
El Obispo al concluir su homilía, felicitó a los nuevos ministros eclesiales laicos deseándoles mucha felicidad en su ministerio y agradeciéndoles por su generosidad y disposición para servir a la Iglesia local. “Que todo lo que hagan nos ayude a cumplir con la misión que Dios nos ha confiado, y que Dios los guíe siempre conforme proclaman Su palabra con Su pueblo.”
El Obispo Solis también agradeció a Northway y a Gray por su liderazgo.
Al concluir la ceremonia los 57 nuevos ministros eclesiales laicos certificados del EMAUS II recibieron su certificación de manos del padre Cavalier y de Gray.
El estar certificada es una gran bendición, expresó Carmen Coronado, feligrés de la parroquia de St. Mary en West Heaven.
“Desde hace 30 años yo sirvo en la Iglesia, pero este programa ha sido un gran enriquecimiento. El tener la oportunidad de seguir aprendiendo es una continuación de la hermosa misión de servicio…a pesar de todos los retos al final todo vale la pena,” dijo Coronado.
Para Mary Jose de Alba, feligrés de la Catedral de la Magdalena la certificación es el comienzo de un nuevo compromiso con la Iglesia.
“Es una gran responsabilidad esta misión comienza aquí…a partir de lo que vayamos a dar. Hay que ir a donde se necesite, llegar a todos los rincones en donde se necesite; esto ha sido una bendición muy grande una responsabilidad inmensa, pero de muchas satisfacciones.”
Para el matrimonio de Eduardo y Elizabeth Pérez de la parroquia de St. Andrew en Riverton, el haberse certificado a través de EMAUS II los ha llenado de alegría.
“Es un gran compromiso como discípulos misioneros tenemos que trabajar más arduamente y evangelizar aún más,” dijo Eduardo Pérez.
“Es un sueño hecho realidad,” agregó su esposa Elizabeth. “Estamos comprometidos con Dios y con nuestra Iglesia a server a todo el Pueblo de Dios.”
Al finalizar los nuevos ministros eclesiales laicos de EMAUS II salieron de la Catedral cantando “ Alma misionera”, la cual se volvió el himno durante su formación.
Marie Mischel contribuyó con este artículo.
La oficina del Ministerio Hispano agradece al Catholic Extension por su generosidad y fe en los hispanos; y al Instituto Congar por la ayuda recibida.
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