Traducido por: Laura Vallejo
TAYLORSVILLE — La parroquia Católica de St. Jude Maronite, está a punto de recibir una donación de 10,000 dólares, pero solo si pueden igualar la cantidad.
La Catholic Extension Society ha dado los fondos condicionados a la Iglesia, la cual en el mes de marzo se mudó de Murray a un nuevo edificio ubicado en Taylorsville.
El nuevo edificio es un poco más grande, pero lo más importante es que cumple con los requisitos del Americans Disability Act.
“Estoy muy contento ya que ahora da una mejor bienvenida,” dijo monseñor Joubran BouMehri, párroco.
La parroquia adquirio la antigua iglesia protestante en el 2019. Las renovaciones incluyeron la extensión de una pared de cerca de 12 pies; se alzaron los techos, nuevos pisos y nueva iluminación. Los vitrales, las bancas, Estaciones de la Cruz y altar fueron removidos de la Iglesia en Murray. También se instaló un nuevo aire acondicionado y un nuevo calentador.
Durante la renovación el sótano se inundó con aguas negras, por lo que tuvo que ser limpiado y reconstruido.
“Básicamente es un nuevo edificio,” dijo Tom Allen, un feligrés quien ha supervisado la renovación.
La primer Misa celebrada en el nuevo edificio se realizó el 23 de febrero.
Las renovaciones tuvieron un costo de cerca de $400, 000 dólares. Si la parroquia recibe los fondos de la Catholic Extension, los fondos servirán para pagar un poco de la deuda. Las condiciones para recibir estos fondos son que la parroquia iguale $10,000 recibiendo donaciones individuales de por lo menos $250.
Monseñor BouMehri dijo que típicamente, la parroquia realizaría un festival o una venta de garaje para recaudar fondos, pero debido a los requisitos del distanciamiento social por la pandemia del coronavirus, ese tipo de recaudaciones no son posibles.
La parroquia tampoco puede realizar la venta de sus postres libaneses, los cuales han estado haciendo por años para recaudar fondos, y la asistencia a Misa es aún baja, todo debido a la pandemia.
“Desde que la pandemia comenzó, las donaciones dejaron de llegar,” dijo Allen.
Como resultado Monseñor BouMehri a apelado por nuevas donaciones a través de una carta en la página de Facebook de la parroquia.
“La meta de este esfuerzo es hacer las cosas mejores en cuanto a las finanzas, para que así nos podamos concentrar en el alcance de la evangelización de nuestra. comunidad de St. Jude,” dijo el padre en la carta.
Hasta ahora la respuesta ha sido buena,” dijo Allen. “Algunas personas que uno pensaría no tienen esa cantidad de dinero, lo han hecho.”
La fecha límite para igualar los fondos es el 30 de septiembre; Allen dijo que hasta la fecha la parroquia ha recaudado casi la mitad de la cantidad necesaria.
La mayor parte del trabajo de la parroquia es realizado por voluntarios, incluyendo el director de educación religiosa, el mantenimiento del jardín y el contador.
“Si no tuviésemos voluntarios en la parroquia, no podríamos operar,” dijo Monseñor BouMehri.
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