Sacerdote construye gruta Mariana en Centro Newman

IC foto/Marie Mischel

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Traducido por: Laura Vallejo

LOGAN — Un pedazo de jardín con sombra ubicado en la parte posterior del Centro Newman de Saint Jerome en la Universidad  Utah State es ahora el hogar de un réplica la gruta de Lourdes.

El padre Joshua Santos, capellán del Centro Newman, construyó la gruta con ayuda de los estudiantes, bajo la supervisión de un contrista quien es un feligrés.

“El padre Joshua trabajó duro todos los días”, para construir la gruta, la cual fue hecha de cemento y piedras y tiene una pequeña caída de agua, dijo el padre Rogelio Felix-Rosas, párroco de la Iglesia de  St. Thomas Aquinas, quien el 13 de septiembre bendijó la gruta.

El presidente del Centro Newman, Nick Sauer, alabó al padre Santos diciendo que el padre “realmente animó a los estudiantes a estar presentes durante el verano haciendo que la grita fuese posible en muy poco tiempo.”

“Siempre he sentido un gran cariño por la Santa Madre, y en dónde sea que vaya siempre me aseguro de que ella tendrá un lugar,” dijo el padre  Santos, quien es originario de las Filipinas y quien el 8 de septiembre del 2018 comenzó su ministerio para la diócesis de Salt Lake City.

Durante la bendición, el padre Felix-Rosas agradeció al padre Santos por haber creado “este espacio para la Madre de Dios, un espacio para poder rezar el Rosario todos los días.”

Lourdes es un lugar en donde han sucedido muchos milagros de sanaciones, dijo el padre Santos agregando que “creo que este es un tiempo muy oportuno para tener a Nuestra Señor a de Lourdes con nosotros… [ella]sanará al mundo.”

Mientras bendecía la gruta, el padre Felix-Rosas  en parte pidió que “todos los que vean esta imágen vean la Gloria del mundo hecha hombre y quien vivió entre nosotros. Bendice esta imágen, bendice esta gruta, escucha los lamentos de todos quienes oran ante tu Santa Madre María, en quien confiamos y compartimos en oración.”

Entre quienes ayudarón a la construcción de la gruta estuvo Matt Seas, estudiante de UVU. Para él la gruta es importante porque “como Católicos, realmente acudimos a nuestra Señora buscando la Gracia.”

“Añade algo fantástico a nuestra comunidad Católica aquí en el campus,” dijo Carson Liesik, residente del Centro  Newman, quien también apoyó con la construcción.

La gruta brinda otra razón para que las personas “vengan y pasen un rato”, en el Centro Newman y es otra característica “que nos reconoce entre la comunidad que nos rodea,” así como un símbolo de fe , agregó Liesik.

La gruta no está totalmente terminada, el padre Santos planea agregar un lugar para que las personas depositen sus intenciones por escrito.