Católicos de Cache Valley dan la bienvenida a todos en su nueva iglesia

Intermountain Catholic

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Arriba, La llave de la iglesia es dada al Administrador Diocesano Monseñor J. Terrence Fitzgerald en una ceremonia efectuada afuera de la iglesia. Abajo, representantes de la comunidad hispana de la parroquia preparan el altar para la Consagración de la Misa después de que fuera bendecido. No sólo las paredes y el altar fueron bendecidos, también la gente fue bendecida, ya que la gente son la iglesia, el Cuerpo y la Sangre de Cristo.fotos del IC por Barbara Lee

HYDE PARK — La ubicación de la nueva Iglesia Católica Santo Tomás de Aquino en Hyde Park, a las afueras de Logan, es un lugar perfecto. La feligrés Marilyn Grover descubrió el lugar hace ocho años caminando con su perro.

Hoy, la nueva iglesia con sus salones de clase y oficinas se yergue en medio de una pradera. Dos lados del nuevo complejo de la parroquia colindan con tierra de labranza, su campanario, separado de la iglesia, está ubicado en un estacionamiento que los feligreses nunca habían visto o disfrutado de algo igual afuera de su iglesia

Párrocos y feligreses, previos y actuales, asistieron el 24 de junio a la dedicación de la nueva iglesia, la cual empezó con el sueño del segundo párroco de la parroquia, el finado Monseñor Jerome Stoffel, quien, a principios de los 60s compró un terreno, invirtiendo en el futuro de la comunidad de fe que él serviría por 30 años. Los párrocos que le siguieron, Padre (ahora Monseñor) Robert J. Bussen, Padres Colin Bircumshaw, David Van Massenhove, Frank Voelmecke, y el Párroco actual Padre Clarence Sandoval, alimentaron cuidadosamente ese sueño, cada uno llevándolo más cerca a buen término.

En su homilía durante la dedicación, Monseñor J. Terrence Fitzgerald, Administrador Diocesano, dijo que él sentía que Monseñor Stoffel, y el párroco fundador de la parroquia, Padre Dominico Joseph Valine, y muchos pioneros de la fe de este Valle, estaban mirando desde arriba a esta nueva y hermosa iglesia y a todos los ahí reunidos. «Deben de estar diciendo: "Esta noche, Cache Valley es un poco como el cielo". Y sí lo es mis amigos.»

La Misa bilingüe de dedicación comenzó afuera de la puerta de entrada de la iglesia, con representantes de la Parroquia presentando la llave de la iglesia a Monseñor Fitzgerald, quien luego se la pasó al Padre Sandoval. Los celebrantes y la congregación fueron pasados a la iglesia con música. Se bendijo el agua, la cual fue rociada después sobre todos los presentes para bendecirlos.

Las oraciones de entrada y las lecturas condujeron a la homilía, un toque emotivo en las memorias compartidas por los Católicos de Cache Valley. Monseñor Fitzgerald dio la homilía en inglés, y luego el Padre Omar Ontiveros la tradujo a español. Los asistentes aplaudieron en ambos casos.

La bendición y dedicación de la iglesia incluyó la unción del altar y de las paredes con el Sagrado Crisma, y pasar incienso sobre el altar, los celebrantes y los participantes por el Maestro de Ceremonias, el Canciller Diocesano Diácono Silvio Mayo.

La Misa concluyó con la colocación del Santísimo Sacramento en el tabernáculo en una capilla detrás de la iglesia.