Extraido de Razones de Vida ¿CUANDO IR? En Roma hay turistas durante todo el año, pero si desea evitar las grandes aglomeraciones y ahorrarse un poco de dinero, la mejor época para visitar la Ciudad Eterna es en temporada baja (otoño-invierno), en primavera–verano, hace mas calor y hay muchos mas turistas pero los días son mas largos y se puede disfrutar mas de la ciudad. Si va en época de calor tenga en cuenta que por toda la ciudad hay fuen-tes con agua potable Si compra agua o refrescos en los bares los precios son muy altos, por lo que es mejor llevar una botella en la bolsa e irla rellenando en las fuentes. Si va en invierno vayan bien abrigados ya que hace mucha humedad y no se olvididen de llevar un paraguas. En invierno los museos y las tiendas cierran muy temprano. ¿COMO LLEGAR? A Roma se puede llegar por todos los medios de transporte: coche, autobús, tren, avión y barco. El tráfico en la ciudad es caótico y encontrar lugar para estacionar los coches es toda una aventura. No todos los hoteles del centro dis-ponen de estacionamientos. ¿DONDE DORMIR? Para dormir, los hoteles más económicos están a las afueras de la ciudad, otra alternativa son los pisos de alquiler, las mejores ofertas se encuentran en temporada baja. También existen residencias para peregrinos en conventos por toda la ciudad, lo bueno de estos lugares es que tienen Oratorio o Iglesia y además se ayuda económicamente a una comunidad religiosa. Por Internet se pueden encontrar buenas ofertas. ¿COMO MOVERSE? Roma dispone de los líneas de Metro que abarcan las zonas mas turísticas de la ciudad, y numerosas líneas de autobús que te llevan a todas partes. Aunque no le pidan el boleto y no haya ningún tipo de control, los servicios de transporte no son gratuitos. Si dispone de poco tiempo para ver la ciudad o no le gusta caminar es aconsejable tomar uno de los autobuses que hacen un recorrido a la ciudad, existen varios (cada uno de un color diferente): el Roma Turística, el Roma Cristiana, el Roma Arqueológica, este último muy recomendable para ir a las catacumbas (¡los días miércoles están cerradas!). Aunque la forma más económica de ver la ciudad es a pie, en ese caso es imprescindible ir con calzado cómodo para recorrer grandes distancias a pie; Roma -como todas las ciudades europeas- se puede hacer a pie ya que las distancias son relativamente cortas. Un buen calzado le evitará muchos problemas. En muchos lugares no hay semáforos ni pasos de peatones. Si quieres cruzar la calle no espere a que se paren los vehículos: hay que invadir la carretera para que se paren.... ¿DONDE COMER? Para comer existen numerosos restaurantes; como norma general los que están en las zonas más turísticas son mucho mas cáros, por eso vale la pena caminar un poquito más para encontrar un restaurante más económico. La zona de la ciudad donde mejor se come es en el barrio de Trastevere, allí se pueden encontrar pizzas desde 3, 4 y 5 euros. La relación calidad precio es muy buena. No se olvides de probar los helados artesanos, famosos en el mundo entero. ¿DONDE IR? Roma es un museo gigantesco, un simple paseo por el centro de la ciudad es algo inolvidable. Para ver los grandes monumentos hay que pensar que por las mañanas los grupos organizados de turistas lo invaden todo, a partir de las 12 todo suele estar menos masificado. Para ir a los museos Vaticanos siempre hay cola, pero no conviene asustarse si esta es de varios kilómetros, la entrada a los museos es como una central de aeropuertos y en 30-45 minutos estás dentro. Para entrar en la Basílica de San Pedro del Vaticano la mejor hora es a primera hora de la mañana o bien partir del mediodía cuando los grupos turísticos ya no están . Para entrar en las Basílicas y en muchas Iglesias hay que ir correctamente vestido, con pantalón largo y camisa o camiseta los hombres, y con falda larga y camisa o camiseta (con mangas y sin tiras) las mujeres, estas pueden ir equipadas con un chal (que los venden a precios muy económicos allí)para cubrirse los hombros en caso de que lleven prendas con tiras. En caso contrario no te dejan entrar (y no es broma). La entrada a las Iglesias y Basílicas suele ser gratuita (al contrario que en el resto de Europa).
Stay Connected With Us