¡'Viva Nuestra Señora de Guadalupe, Viva San Juan Diego, Viva Cristo Rey'!

IC foto/Laura Vallejo

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Saludando y agradeciendo a cada uno de los presentes en la catedral, el Obispo Solis dijo que estaba realmente feliz de poder participar en las festividades ya que ?esta es mi primera vez celebrando nuestra devoción aquí en la Diócesis de Salt Lake City. Mi corazón está lleno de alegría,? dijo el obispo para entonces alzar su voz y decir ?Viva la Virgen de Guadalupe, Viva San Juan Diego, Viva Cristo Rey.?

SALT LAKE CITY — Conforme caía la noche del 11 de diciembre cientos de Católicos de toda la Diócesis de Salt Lake City llenaban las bancas de la Catedral de la Magdalena para prepararse para la celebración de Nuestra Señora de Guadalupe.

Este año las festividades en la catedral comenzaron con la representación de las apariciones de la Virgen ante San Juan Diego en el cerro del Tepeyac en 1531 en la ciudad de México. Los actores fueron los niños participantes en las clases de catecismo de la Catedral quienes usaron vestimentas para representar los personajes principales de la historia.

Después de eso el Santo Rosario fue orado en la Iglesia, mientras que en las afueras de la misma los Caballeros de Colón se preparaban para realizar la procesión, durante la cual una imágen de Nuestra Señora de Guadalupe fue transportada por las calles aledañas a la Catedral.

Enfrentándose a temperaturas gélidas, las personas caminaron por las calles alrededor de la Catedral guiados por el Reverendísimo Oscar A. Solis, Obispo de Salt Lake City quien a las 11 p.m. presidió la Santa Misa en honor a la Santa Patrona.

Saludando y agradeciendo a cada uno de los presentes en la catedral, el Obispo Solis dijo que estaba realmente feliz de poder participar en las festividades ya que “esta es mi primera vez celebrando nuestra devoción aquí en la Diócesis de Salt Lake City. Mi corazón está lleno de alegría,” dijo el obispo para entonces alzar su voz y decir “Viva la Virgen de Guadalupe, Viva San Juan Diego, Viva Cristo Rey.”

Durante su homilía, el Obispo narró brevemente las apariciones de Nuestra Señora de Guadalupe ante Juan Diego en el Tepeyac, enfatizando a quienes estaban presentes en la Catedral que esa noche estaban reunidos como una sola comunidad de fe celebrando el espíritu de acción de gracias a Nuestra Señora.

“Nuestro Dios nos dio el maravilloso don de Cristo Su Hijo, el mundo recibe esta salvación a través de María, quien dio luz a Jesús nuestro Salvador. Cristo al morir, nos presentó a su madre como nuestra madre. Hoy celebramos este don especial de Dios. Nuestra madre bajo el nombre de Nuestra Señora de Guadalupe,” dijo el Obispo Solis.

El Obispo explicó como Nuestra Señora de Guadalupe no se apareció como una diosa sino como una mujer humilde con tez morena y con rasgos indígenas.

“Ella vino por la gente y para la gente, especialmente para los pobres, los más indefensos, desde entones millones de personas se convirtieron a la fe Católica,” dijo el Obispo Solis.

Diciendo que Nuestra Señora de Guadalupe es considerada la madre de la Evangelización en las Américas el obispo dijo que cuando se apareció en el Tepeyac dijo que todos éramos hijos de Dios y que estábamos creados a su imagen y semejanza y “Dios nos asegura Su amor y sus cuidados a través de Nuestra Señora de Guadalupe.  Esta noche oramos y le pedimos por sus bendiciones, para que nos enseñe a cuidarnos los unos a los otros,” dijo el Obispo Solis.

Subrayando que todos están conscientes de las luchas y retos con los que las personas se enfrentan día a día en el mundo de hoy el Obispo Solis dio un mensaje de esperanza.

“La pobreza, problemas familiares, problemas legales e inmigratorios- muchos se enfrentan a un camino duro en sus vidas, preocupados por su bienestar y pro el futuro de sus familias y de sus hijos,” dijo el Obispo. “Las personas que no tienen documentos legales, que tiene problemas inmigratorios, y que se enfrentan al miedo de las deportaciones, de la separación de sus familias. Y que vive en miedo constante…En esta celebración de Nuestra Señora de Guadalupe, Dios nos brinda esperanza. Nuestra Señora nos dice que Dios nos ama, que esta con nosotros, que nunca nos olvida.”

El Obispo urgió a la congregación a nunca olvidarse de las palabras de Nuestra Señora: ‘No tengan miedo. Yo estoy con ustedes. Yo soy su madre.”

Estas palabras ofrecen consuelo y fuerza en estos tiempos difíciles.

“Así es que esta noche le pedimos a Dios que a través de la intersección de Nuestra Señora de Guadalupe … nos ayudemos, apoyemos a quienes lo necesitan, especialmente a los inmigrantes y refugiados, a los bebes inocentes que mueren por el aborto, a los enfermos y a los ancianos, y a quienes viven marginados en la sociedad. También pedimos por que nuestros líderes gubernamentales para que a través de la intersección del Espíritu Santo hagan justicia, hagan lo humano y reflejen el amor de Dios para todos,” dijo el Obispo Solis.

La Misa fue concelebrada por el padre Martin Diaz, Rector de la catedral de la Magdalena, y por el padre Christopher Gray, Vicario Parroquial.

Después de la Misa un grupo de Danzantes Aztecas rindieron tributo a Nuestra Señora de Guadalupe para que después las personas procedieran al sótano de la Catedral en donde pan de dulce, tamales y chocolate caliente fueron el deleite de chicos y grandes.

“No tengo palabras para describir la emoción que siento,” dijo Beatriz Romero  feligrés de la Catedral de la Magdalena quien ayudó a preparar el chocolate para las personas. “Esto es algo muy pequeño que puedo hacer en agradecimiento por todo lo que Ella nos ha dado…le tengo mucha devoción y esta es una pequeña forma de expresarle mi agradecimiento.”